NEWTON



La manzana se desprende de la rama y cae sobre la gran cabeza de Newton. Newton observa la manzana, luego mira el árbol y corre acelerado a explicar el hecho.

Al día siguiente Newton regresa al lugar. Aún lleva la manzana en su mano derecha. Se detiene al pie del árbol y lo aprecia con cuidado: es un pino.

Su explicación será, apenas, un argumento clásico. Nada de relativismos. Nada.


(Teatro de Cuentos. Acto X)